Nacido para campeón

A mediados de la década del 80 nació en Ciudadela, y se crió en Fuerte Apache, en el medio de las balas ("yo sabía que no estaba bien escuchar tiroteos todos los días, pero era algo normal en mi barrio"), Carlitos Tevez fue un chico con infancia muy pobre. Y como típico chico de un barrio marginado de Sudamérica, tiene en la pelota su mayor hobbie y único futuro. Su puesto es de delantero, un media punta fuerte y robusto como Maradona. Hizo inferiores en All Boys siendo Martínez, pero el proyecto boquense de sacar jugadores de inferiores lo capturó para seguir y formarse en Casa Amarilla, ya como Carlos Tevez.
Debutó en el 2001, en Córdoba, de la mano del Gran DT Carlos Bianchi. En ese cotejo Talleres ganó 1-0 pero Carlitos ya mostró ser diferente, por que se mostraba todo el tiempo, pedía y participaba de la elaboración del juego, no se escondía, no se apichonaba.

Formó junto a Maxi López la delantera argentina del Mundial sub17 de Trinidad y Tobago y obtuvo el cuarto lugar.

Se fue el Virrey, vino el 2002 y trajo a Tabarez. El Apache debutaría, pero esta vez en la Copa Libertadores. El partido fue por los cuartos de final en La Bombonera contra un equipo muy dificil que para Boca en torneos internacionales lo complica casí siempre: Olimpia. Fue el último partido que jugó con Riquelme en Boca e hizo un gol. Luego Boca quedaría eliminado.

Se fue el Maestro, vino el 2003 y trajo de vuelta a Bianchi. Carlitos ya era LA gran promesa del fútbol criollo, disputó el Sudamericano sub20 y tendría un rendimiento muy flojo. Volvió a Boca ya en la segunda fase y sería el as de espadas de Boca en la Copa: campeón, marcando 4 goles en 7 partidos. En el Apertura sería la gran figura, marcaría goles de todos los colores y el Bayern Münich pondría los ojos en el delantero. Pero quería seguir jugando. Ganó el Apertura y la Intercontinental contra el Milan de Schevchenko, Kaká, Seedorf, Rui Costa, Inzaghi y Maldini. Un espectacular 2003. Campeón de todo.

Tuvo un 2004 de maduración. En algunos partidos marcó goles fabulosos como a Lanús, Talleres y Estudiantes, pero en otros anduvo flojo. Típico de crack prematuro. El 17 de mayo marcaría el gol más importante en Boca, luego de un desborde de Cángele define como goleador de raza y enmudecería en Monumental en la semifinal, pero sería expulsado por incitar a la violencia con su festejo. Suspendido, jugó la final de vuelta contra el Once Caldas.

Llegaría la selección y los JJ.OO de Atenas. Fue figura y goleador. Con un golazo de volea eliminaría a Italia en semifinales. La Celeste y Blanca obtendría la dorada luego de 52 años con un gol suyo para ganarle 1-0 a Praguay. Pero no hay tiempo, en Perú juega la Copa América yendo de menor a mayor. De suplente a titular haciendo hermosos goles de tiro libres. Perdió la final de manera increíble con el Brasil de Adriano.

Pero no hay tiempo. Se fue su padre futbolístico, Bianchi, y vendría Brindisi. A diferencia del Virrey, Miguelito lo convocaría 48 después de haber disputado la final en Perú para jugar la Recopa en Miami con el Cienciano. Marcaría otro gol, el 1-0 parcial, pero sería la tercer Copa perdida por penales en menos de dos meses.

Su segundo semestre continuó ambiguo, como picos muy altos y muy bajos. Los sábados salía a vivir la vida de 20 años con su novia Fassi (y varios escándalos), y los domingos rompía redes. Pero a fines de un cargadísimo 2004 se iría como Maradona: ganado un torneo (Copa Sudamericana) marcando un gol en el último partido y vendido al exterior (Corinthians).

En Brasil obvtuvo la paz que acá no pudo obtener. Y reventó todo. Consiguió que los hinchas usaran remeras de la selección argentina. Fue goleador, figura (mejor jugador de América) y campeón del Brasileirao.

Ya en el 2006 llegaría el Mundial de Alemania y como en la Copa América iría de suplente a titular marcandole un golazo a Serbia y Montenegro. Su desembarco en Europa era inminente. Y su hogar sería el West Ham. Le tocó luchar siendo poco menos que suplente, pero a fuerza de goles (como el que le hace al Tottenham) fue yendo de menor a mayor. Hasta que en la última fecha lo salva al West Ham del descenso nada menos que en el Old Trafford, marcando el gol de la histórica victoria.

Ni lerdo ni perezoso, Ferguson lo buscó hasta el hartazgo (traba judicial que se resolvió con un préstamo) para formar lo que sería "el mejor equipo que dirigí". Lo juntó con Cristiano Ronaldo, Giggs, y el Apache inglés Wayne Rooney.
Otra vez le costó acomodarse, pero como siempre, su ley primera: de menor a mayor, trabajar trabajar y trabajar. Debutó en la red nada menos que con el Chelsea, haciendo un gol de goleador nato. Ferguson y su nuevo chiche daban resultado.

En la penúltima fecha de la Premier League marcó el empate faltando 5 minutos contra el Blackburn Rovers para llegar a la fecha final con la misma cantidad de puntos que el ex equipo de Mouriño. Ante el Wigan obtendría la tercer liga nacional y ante el Chelsea el pasado miércoles (21/5) obtendría algo que solo había obtenido Cafú: la Champions.

Pero Tevez va por más, no le basta tener a los 24 años más títulos que jugadores como Francescoli. No le basta ser con ser el nueve titular de Basile, por que siempre busca más. Por que como su padre futbolístico (Bianchi) y el club de sus amores (Boca): nació para campeón.

Palmarés:
2003: Sudamericano sub20 (Argentina)
2003: Copa Libertadores (Boca)
2003: Apertura (Boca)
2003: Intercontinental (Boca)
2003: Mejor jugador de América
2004: Sudamericano Pre-Olímpico (Argentina)
2004: Medalla de Oro JJ.OO. Atenas (Argentina)
2004: Sudamericana (Boca)
2004: Mejor jugador de América
2005: Brasileirao (Corinthians)
2005: Mejor jugador de América
2008: Premier League (Manchester United)
2008: Champions League (Manchester United)